Taxco,
Gro., septiembre 24 de 2014 (IRZA).- El agua contaminada por las
presas de jales de la Unidad Minera de este municipio, compuestas por los
residuos del proceso de extracción de minerales, desemboca al río Balsas, el
más grande de Guerrero.
Lo que ha afectado a por lo menos 10 comunidades de este
municipio, pero podría “estar contaminando más”. El color ámbar del agua que
escurre de la presa de jales al interior de la bocamina El Solar muestra
la irregularidad.
En los 40’s Grupo México extraía plata, zinc y plomo de
tres minas: El Solar, Remedios, y San Antonio (La Concha), desde esa
década, según recuerda Guillermo Salgado, uno de los obreros de la sección 17
del sindicato minero, que mantiene una huelga desde hace siete años, el agua
está así y nadie ha hecho nada.
Los arroyos y manantiales de esa zona no están
contaminados, pero los residuos que salen de la mina, que ya no es trabajada,
mantienen atemorizada a la población, “por eso se requiere que se normalice la
situación”.
Guillermo Salgado, quien muestra la contaminación en el
punto que los mineros denominan 14-12, frente a la bocamina de El Solar,
asegura que hay comunidades cercanas a ese lugar como Puente Campuzano,
Hueymatla, San Sebasatián, Taxco el Viejo, cuyos animales han tomado el agua de
ese río Xochula, pero “nadie ha hecho nada, parece que es normal”.
En un estudio de suelo y residuos de la Procuraduría
Federal de Protección al Ambiente (Profepa) hecho desde 2009, a 30 meses de la
huelga de la sección 17 del sindicato minero, asentado en el expediente:
PFPA/3.1/2C26.1/00011-09, la dependencia concluye que esas presas de jales
tienen altos grados de contaminación, que podrían traer complicaciones en la
población; desde ese entonces, hasta ahora, no hay ninguna acción hecha por
Grupo México para resarcir las complicaciones.
En las conclusiones, la dependencia federal determinó que
el suelo está contaminado por arsénico, plomo, cadmio y vanadio. Sugirió a la
Comisión Nacional del Agua (Conagua) analizar los niveles de contaminantes en
los caudales de agua; sin embargo, desde esa fecha nada ha cambiado en el área,
denuncia el dirigente de la sección 17 del sindicato minero, Roberto Hernández
Mojica.
En la comunidad de Xochula, a unos 20 minutos del
municipio minero está la bocamina, la entrada de la Unidad del Solar 1, donde
se observa como el río de ese lugar se une a las aguas amarillentas. En las
comunidades cercanas a la bocamina, como El Fraile, de acuerdo a los mineros de
la sección 17, hay niños a quienes les hicieron estudios de sangre y resultaron
con 20% de plomo en la sangre, lo que podría ocasionar leucemia.
Lo que también ocurre en las comunidades de Dolores,
Santa Rosa de Lima y Paintla, en cuyas comunidades, según el estudio, los daños
por el agua son evidentes, aunque aún no se ha realizado un muestreo que
contemple a más pueblos; incluso de otros municipios como Iguala, que colindan
con Taxco.
La Profepa indica en ese estudio que “tiene conocimiento que
en un estudio de análisis de sangre realizado a alumnos de una escuela cercana
a las minas, tienen presencia de plomo. Así como consideran que existe
contaminación del agua y suelo ocasionado por los jales abandonados en los
pobaldos de Santa Rosa de Lima, El Fraile y Paintla”.
La Profepa señala en su estudio que se tomaron como
referencia para la elaboración de su opinión técnica las concentraciones de
referencia totales para un uso de suelo agrícola/ residencial/ comercial
establecidas en la Norma Oficial Mexicana NOM- 147- SEMARNAT/SSA1-2004, que
establece criterios para determinar las concentraciones de remedicación de
suelos contaminados por arsénico, bario, berilio, cadmio, entre otros
componentes.
Del análisis del laboratorio de la Profepa, de doce
metales solicitados en las quince muestras a nivel superficial y a diferente
profundidad, se encontró que para el arsénico y el plomo en todas las muestras,
a excepción de algunas, rebasan el límite máximo permisible que es de 22 mg/kg
y 400 mg/kg.
Desde el 30 de julio de 2007, 398 mineros de Taxco se
declararon en huelga, de los que han resistido 156, por falta de la minera al
Contrato Colectivo de Trabajo. Un mes antes de estallido, en el preámbulo de la
negociación anual del CCT, Minera México dijo que cerraría trabajos porque la
unidad agotó sus reservas; aunque según ellos quedan 30 años de vida útil.
“Son ellos quienes no quieren hacerse responsables de la
situación, la contaminación es evidente, pero ni las autoridades obligan a
Grupo México a resarcir el daño”, señala Esteban Estrada, otro de los mineros
en huelga.
Grupo México actualmente enfrenta la acusación de la
mayor contaminación de río Sonora por el manejo irresponsable de tóxicos.
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