Chilpancingo, Gro., julio 21
de 2013 (IRZA).- Octavio Clímek Alcaraz, ambientalista y ex
funcionario de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semaren),
consideró que cualquier remodelación como parte del programa de Mejoramiento de
Imagen Urbana debe ser consultada a los habitantes.
Dijo
que la ciudadanía merece tener lugares bellos por donde caminar, pero también
áreas verdes para su esparcimiento.
“Se
debió discutir abiertamente el tema (del corte de árboles y remodelación de la
plaza). No se pueden hacer inversiones así como así sin consultar a la gente,
cuando hay otras prioridades. Todas las decisiones de carácter urbanístico se
deben consultar, no podemos estar ofertándole a la gente cemento. No se puede
tener una enorme plancha de concreto como asoleadero para las lagartijas”,
consideró.
Dijo
que los espacios de recreación en esta capital son insuficientes, como lo es el
número de metros cuadrados de área verde por habitante no sólo en el estado
sino en todo el país, según organismos internacionales, lo cual no cuidan los
ayuntamientos ni el gobierno estatal ni federal al realizar una obra.
Precisó
que no conoce el proyecto de remodelación del zócalo capitalino y por ello
evitó opinar sobre el cómo se realiza; sin embargo, aseguró que si un área no
ayuda a la recreación difícilmente cumple su objetivo, y si no se pregunta a la
ciudadanía sobre cómo quiere su imagen urbana, tampoco la obra da los
resultados esperados.
Lamentó
que como país no se cumpla con las normas internacionales de metros cuadrados
de áreas verdes por persona, “no se trata sólo decir si el proyecto es feo o es
bonito, seguramente es bonito, no tengo el gusto de conocerlo, pero la gente y
más una capital como lo es Chilpancingo debe tener un zócalo bello, lleno de
área verde, como pasa en Mérida”.
Las
condiciones climatológicas, independientemente de las obras que se realicen, si
no son las adecuadas para sedimentar totalmente un espacio, no se deben hacer,
dijo, eso es una irresponsabilidad; además de que debería, -no existe como
tal-, un Consejo municipal de urbanismo, en que todos los habitantes, no sólo
los empresarios o un grupo en especifico, participen con opiniones sustentadas
y concretas a cerca de su ciudad.
“No
sé que vaya a pasar con todo esto, pero debería haber actas de especialistas
que dictaminen que dicho árbol debe ser cortado y se debe especificar por qué.
Los programas vienen de los impuestos de la gente y si a ésta no se le
consulta, en mi opinión es algo sumamente grave que atenta contra sus
derechos”, opinó.
Enfatizó
en que el proyecto debe contar con las actas de inspección correspondientes y
un estudio de impacto ambiental hecho específicamente para justificar la
realización de la obra, éste debe ser reciente y contar con los permisos
correspondientes por la Semaren, la Procuraduría de Protección al Ambiente del
Gobierno Estatal (Propeg) y con las licitaciones a las empresas encargadas de
ejecutar la obra, en regla, en tiempo y que éstas de manera adecuada hayan
justificado su participación.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario