Chilpancingo,
Gro., abril 02 de 2013 (IRZA).- Policías preventivos del gobierno estatal, acuertelados
desde el pasado viernes para disuadir las eventuales protestas del magisterio,
denunciaron una serie de violaciones a sus derechos laborales por parte de las
autoridades.
“Nos dieron de desayunar huevo guisado, un poco de frijol, café y
tortillas frías”, dijo un policía que al igual que más de más de 200 elementos
de esta corporación resguardaban los accesos del Congreso.
Ayer, durante la sesión, todos los accesos del Congreso fueron cubiertos
por los policías.
“Nos tienen acuartelados desde el pasado viernes y nos dijeron que vamos
a desalojar a los maestros si bloquean edificios o tiendas, bancos o bloquean
la autopista del Sol”, dijo uno de los uniformados.
Otro policía dice que solo de la Costa Chica el gobierno movió a 200
policías. “Somos más de mil, aparte dicen que hay mil 500 policías
federales", reveló el uniformado.
Denunció que 150 de sus compañeros de nuevo ingreso a quienes se les dio
la orden de estar en el Congreso, tienen mes y medio sin cobrar. “Y los
policías que ya tenemos rato aquí, nos rasuran los viáticos, no tenemos
uniformes, botas y las armas de cargo están en desuso”, externó.
Eran las 12 del día, y los policías empezaron a colocar las vallas
metálicas ya que les informaron que los maestros se dirigían hacia el Congreso.
¿Ya acabó la sesión, es cierto que vienen los maestros?, preguntó un policía.
Poco después de mediodía, 35 diputados aprobaron en lo general y en lo
particular la iniciativa.
Una vez que concluyó la sesión, los legisladores salieron de manera
apresurada del edificio a bordo de sus vehículos ante el temor de que
aparecieran los maestros de la CETEG.
Los maestros decidieron no acudir al Congreso. "Qué bueno que los
maestros no vinieron, así por lo menos, hoy nos van a traer de comer”, señaló
un policía.
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