Chilpancingo,
Gro., octubre 29 de 2013 (IRZA).- La entrega del premio al Mérito Civil
entregado al Ejército y la Marina por su participación en el rescate de
personas y entrega de víveres a damnificados por la tormenta tropical “Manuel”
fue injusto.
“Se lo merecían muchos de la sociedad civil, organismos no
gubernamentales, menos el Ejército”, criticó el secretario técnico de la Red
Guerrerense de Organismos Defensores de Derechos Humanos, Manuel Olivares
Hernández.
En
conferencia de prensa, Olivares justificó su opinión tras recordar las
múltiples violaciones a derechos humanos que históricamente han realizado ambas
instituciones, pero enfatizó más en la línea “represiva” que durante años el
Ejército ha seguido contra las organizaciones defensoras de derechos humanos, y
población en condiciones de vulnerabilidad, como la indígena.
El
gobierno del estado galardonó el 28 de octubre, como parte de los festejos por
el 164 aniversario de la Erección del estado de Guerrero con los premios al
Mérito Civil tanto al Ejército y Marina, y también a programas gubernamentales
impulsados por el DIF estatal.
Acciones
que consideró injustas porque consideró que en esta contingencia por los
fenómenos naturales que damnificaron a miles de familias, “quien demostró la
casta fue la población”.
Dijo
que hay una estrategia del gobierno federal para posicionar al Ejército en
estos tiempos donde se vive “una dictadura militar. La intención es darle al
Ejército un carácter protagónico. Y que es, sin duda, una estrategia de
contrainsurgencia, lavándole la cara.Cuando ya se conoce su historial. Por
ejemplo, la Comverdad (comisión de la verdad) deja claro que fue el Ejército el
principal responsable de muchas desapariciones”.
La
entrega del premio más importante, “Vicente Guerrero”, de “actos históricos en
beneficio del estado”, da un mensaje de que el gobierno refuerza al Ejército,
para que cuando lo necesite lo apoye, y sea un Ejército- Gobierno.
En
la premiación a las secretarias de la Defensa Nacional (Sedena) y de Marina
(Semar), que en lugar de los secretarios, el general Salvador Cienfuegos Zepeda
y el almirante Vidal Francisco Soberón Sanz, recibieron los representantes de
la novena región militar, el general Genaro Fausto Lozano y de octava región
naval, el almirante José Rafael Ojeda.
Históricamente
en Guerrero, el Ejército ha sido cuestionado por violaciones a los derechos
humanos, incluso en casos significativos hasta de trascendencia internacional,
como el de las indígenas me’ phaa Valentina Rosendo Cantú e Inés Fernández
Ortega, violadas por militares, que llevaron su caso a la Corte Interamericana
de Derechos Humanos (Coidh).
También
en la lista de violaciones a derechos humanos, enfatizó Manuel Olivares, está
la masacre de El Charco, entre otras; las múltiples desapariciones forzadas de
la guerra sucia, como la de Rosendo Radilla, caso por el que por primera vez
sentenciaron al Estado mexicano. Las violaciones están documentadas en tiempos
distintos, y dijo la Comverdad lo evidenció.
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