Chilpancingo,
Gro., marzo 17 de 2013 (IRZA).- Las diferentes modalidades
de policías ciudadanas como la Coordinadora Regional de Autoridades
Comunitarias-Policía Comunitaria (CRAC-PC) y la Coordinación Regional de
Seguridad y Justicia de la Policía Ciudadana y Popular (CRSJ-PCP), que aglutina
a los municipios de Huamuxtitlán, Cualác, y Temalacatzingo, municipio de
Olinalá advirtieron que no se incorporarán al mando único.
El promotor de CRAC de El Paraíso, municipio de Ayutla,
Gonzalo Molina González, destacó que esta instancia de justicia comunitaria no
formará parte del Mando Único para los cuerpos policíacos, “si detiene a los
policías comunitarios estará violando la Ley 701 del estado de Guerrero, y el
convenio 169 de la Organización Internacional del Trabajo, y otros acuerdos
firmados por el gobierno mexicano con la ONU”.
La CRSJ-PCP aseguró, “la estrategia de Mando Único, que
promueven, es una estrategia de guerra y en Guerrero no estamos en guerra, por
eso su viabilidad está en duda. Lo que proponemos es que teniendo como base el
diálogo y el entendimiento, unifiquemos las acciones y trabajemos para
desarrollar a nuestro estado y nuestro país”.
Además condenó los intentos del Ejército Mexicano por
desarmar a la Policía Comunitaria, del poblado de Acatempa, municipio de
Tixtla, la semana pasada.
El mando único, dijo, fue un acuerdo tomado por el
gobernador Ángel Aguirre presuntamente con los 81 alcaldes, “pero no consultó a
las comunidades, no hubo ningún tipo de consulta en los municipios, y tengo
entendido que tampoco el Congreso del Estado, ha debatido la propuesta del
mando único para los cuerpos policíacos”.
Insistió que dicho acuerdo no puede estar por encima de
la ley y no tienen un sustento legal aprobado por los pueblos. Pidieron respeto
al gobernador y a todo su gabinete, para el sistema de justicia que lleva 17
años funcionando y que, según dijo, ha permitido que más del 90 por ciento de
los delitos disminuyeran en los territorios comunitarios de la Montaña y Costa
Chica.
Destacó que Guerrero no está en Guerra y aseguró que su
lucha es por la vida, la seguridad, la justicia y la paz social. El operativo
de más de 500 efectivos entre policías y militares que intentó desarmar a la
Policía Comunitaria de Acatempa, no es una señal de buen gobierno, opinó, “o
quizá al gobernador le están informando mal”.
Este organismo consideró que los grupos de autodefensa y
la Unión de Pueblos y Organizaciones del Estado de Guerrero (UPOEG), que
encabezan Bruno y Cirino Placido Valerio, “son un grupo paramilitar, igual que
Antorcha Campesina, que su misión es destruir y confrontar a los pueblos,
dividirlos y crear el caos, son personas disfuncionales que viven del chantaje
y bajo la tulela de algunos gobiernos locales, provocan la violencia y se
confabulan con los MPs para extorsionar a los campesinos, como lo hacen en
Olinalá y otros lugares”.
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